En la actualidad, México enfrenta un reto sin precedentes en materia de energía, donde convergen variables como la transición hacia un sistema sustentable, la garantía y confiabilidad del suministro al menor precio posible, y la optimización de la combinación entre energía firme y renovable. Además, se requiere una mayor cantidad de energía para sostener el crecimiento del país y el auge de nuevas tecnologías como la Inteligencia Artificial y los Data Centers. Mientras tanto, debatimos sobre la combinación óptima entre integración regional y autosuficiencia energética. Todo esto se desarrolla bajo una nueva Reforma Energética 2025 que busca aumentar la infraestructura energética, incluyendo esquemas de colaboración público-privada bajo la rectoría del estado. Sin duda, estamos atravesando un momento de transformación para el sector energético mexicano.
En este contexto de transformación, desde la Asociación Mexicana de Energía (AME) continuamos comprometidos en colaborar junto al gobierno para construir un futuro más sustentable, eficiente, justo e inclusivo para todo México. Es a través de la colaboración y el diálogo que construiremos el camino hacia la sostenibilidad, con un marco adecuado de políticas públicas y certeza jurídica que favorezca la inversión y, al mismo tiempo, garantice la seguridad energética que necesita México, construyendo un legado duradero de seguridad y sustentabilidad energética para las próximas generaciones.